"Como los que publican sus historias en Nifty hacen un esfuerzo por pensar en historias para entretenerlos, si está en tus posibilidades dona a Nifty para que puedas seguir entreteniéndote". Estas son historias cortas ficticias y no continúan a no ser que sea especificado, todos los personajes y eventos son ficticios y cualquier semejanza con la realidad es mera coincidencia, y no representan mi forma de pensar ya que para mí todos los seres humanos son iguales y tienen los mismos derechos. Estas son historias homo eróticas que incluyen esclavitud y humillación de hombres, con la intención de entretener a adultos, si tú por alguna razón te sientes ofendido con este contenido no lo leas, la edad legal para leer esta historia dentro de la jurisdicción que fue escrita es de 18 años o más, aunque es recomendable que verifiques en la jurisdicción en donde te encuentras la edad legal mínima para leerla. Nota Importante: Si tú lees esta historia estás certificando que tienes la edad legal para hacerlo. Retroalimentación y comentarios son bienvenidos así como ideas envíalos a billy100mx@yahoo.com.mx
SALVAJES 43
Este encuerado adolescente blanquillo salvaje de dieciocho años de
pelo castaño claro se perdió y se separó de su manada, llevaba varios
días sin comer y estaba muy hambriento, y como olfateó la comida llego
a una granja, por instinto intentaba estar lejos de las zonas
habitadas porque sabía que ahí estaban los amos latinos, pero como ya
llevaba varios días sin comer su hambre fue más grande que su miedo y
no tuvo más alternativa que entrar en la granja.
Por varios días estuvo buscando a su manada con la esperanza de
poderlos encontrar pero nunca lo consiguió e incluso ya los huesos de
su tórax quedaban marcados en su piel, como el animal salvaje que era
siempre había tenido buena condición física, pero en esos momentos
se sentía débil y su instinto le decía que si no comía pronto
moriría, en otras circunstancias él hubiera ido al basurero del pueblo
a conseguir la comida que tanto necesitaba, pero como nunca había
estado antes ahí no sabía en donde estaba además de que estaba solo.
La razón por la cual se había separado de la manda era porque uno de
sus hermanos lo estaba molestando pidiéndole que le permitiera mamar su
verga para poder tragar sus mecos y así obtener las proteínas, pero
él no se lo quiso dar porque antes ya había permitido que otros machos
le mamaran la verga para obtenerlo y su glande estaba muy irritado y
sensible, así que decidió alejarse para que su hermano no lo
molestara, pero en esos momentos la manada decidió moverse del lugar
porque habían visto que los guardias latinos estaban muy cerca del
lugar en donde vivían.
Él nunca se dio cuenta de que su manda se había ido ya que había
decidido nadar en el agua fría y con ello aliviar la irritación de su
glande, y cuando regreso ya era de noche y no encontró a nadie, y
nunca había caminado por la noche solo, ya que a los cachorros y a
los adolescentes como él no les permitían andar solos en la noche,
así que decidió esperar escondido en una cueva a que sus padres
regresaran por él, pero cuando en la noche oyó voces que eran de los
amos latinos y que estaban muy cerca de donde él se encontraba,
decidió salir de la cueva y escondiéndose entre el follaje tal y como
su padre y los otros machos de la manada le habían enseñado y
ayudado por la oscuridad se alejó del lugar, pero sin saberlo se fue
en la dirección contraria de donde se había ido la manada.
El olor de la comida era tan intenso que le hizo salir de su escondite y
que cruzara la cerca y entrara a la granja, de antemano vio que varios
amos Latinos se subían a esas cosas extrañas que utilizaban para
transportarse, pero el hambre le ha hecho quedar expuesto y que
cualquiera lo pueda ver, sin embargo ha decidido ser paciente y esperar
unos minutos más para ver si no hay más ruidos extraños en la casa, y
si considera que es seguro irá primeramente al basurero y si es
necesario intentará entrar en la casa para conseguir el alimento, y
después de eso si tiene suerte intentará buscar a su manada o
encontrar otra, ya que necesita los mecos de otros machos, y la
leche materna que producen las hembras.
Para los jóvenes amos latinos es muy divertido ver vagar por el bosque
a los encuerados animales salvajes blancos pero sobre todo cazarlos, y a
muchos de ellos les gustaría llevar esa clase de vida ya que pensaban
que era muy fácil sin saber que en realidad era todo lo contrario y la
manera en que sufrían los blanquillos, no solo por tener que estar
huyendo de los temidos cazadores latinos que eran como llamaban a los
latinos que iban y los capturaban, sino también porque como este joven
macho encuerado blanco de pelo castaño claro muchas veces pasaban
hambre y sufrían al ser separados de sus manadas y familias, aunque los
amos latinos consideraban que los blancos salvajes no tenían
sentimientos y el ser separado de sus manadas no les causaba ningún
daño psicológico, sin embargo era todo lo contrario y el sufrimiento
que sentían era interpretado como el miedo de ser atrapado por un ser
superior latino que los iba a domesticar.
Por varios minutos este encuerado macho blanco estuvo observando el
lugar tan extraño en donde vivían los amos latinos que para él no era
otra cosa que una cueva muy rara para ver si detectaba algún movimiento
o podía escuchar algún ruido ya que tenía su sentido del oído,
olfato y vista muy desarrollados debido a las condiciones salvajes en
las que vivía, y cuando estaba a punto de ir al lugar en donde estaba
el basurero de dónde provenía el olor delicioso en donde los amos
latinos ponían la comida que no era otra cosa que el basurero, aterrado
vio como tres amos latinos m� s o menos de su edad pero muy musculosos
que para su mente no era otra cosa que eran m� s fuerte que él, sacaban
arrastrando a cinco blanquillos de la misma edad del que estaba
observando al patio de la casa, el chico salvaje estaba aterrado porque
no tenía donde esconderse estando pegado a la cerca y solo con un
árbol cerca y su instinto animal le dijo que se quedara quieto y no
intentara moverse ya que en esos momentos esa era su mejor protección,
con incredulidad estaba viendo como los amos latinos trataban a los
machos encuerados blancos los cuales eran arrastrados y gritaban de
dolor cuando sus cuerpos eran tocados por unas cosas que llevaban los
amos latinos y que se llamaban látigos, aunque para él tanto el nombre
como el dolor que causaba el látigo eran completamente desconocidos.
El chico estaba en cuclillas observando aquella escena la cual no podía
comprender ya que nunca antes había visto a blanquillos en cautiverio y
lo que le extrañaba era que no se intentaran defender a pesar de que
eran m� s que los amos latinos, pero los gritos de dolor y la forma en
que se movían los desgraciados machos blancos domesticados le indicaban
a su cerebro animal que esas cosas que tenían los amos latinos en las
manos tenían algo mágico para controlar a los blanquillos aunque para
él todo lo que no podía explicarse era mágico, y después de un rato
de ver como los blanquillos se revolcaban en el piso mientras esas cosas
los tocaban vio cómo fueron obligados a ponerse de pie forzados por
unas cosas raras que tenían puestas en el cuello y que les estiraba la
cabeza que no era m� s que el collar, y por una cosa rara delgada y
plateada que tenían en sus manos los amos latinos muy parecido a las
ramas que utilizaban ellos para arrastrar cosas pero que nunca antes
las había visto de ese color que no eran otra cosa m� s que las cadenas
con las que controlaban a los esclavos, y después de golpearles las
nalgas y las vergas e incluso los huevos y oír m� s gritos vio como los
encuerados machos jóvenes cazados empezaban a mover sus cuerpo en forma
extraña mientras unos ruidos raros que lo asustaron se escuchaban y
que no sabía de dónde venían.
Pero el hambre del encuerado adolescente blanco salvaje pudo m� s y
mientras veía como las vergas de los esclavizados machos blancos se
movían como locas de un lado a otro y arriba y abajo mientras bailaban
y brincaban al ritmo de la música, el con cautela y sin perder de vista
a los temidos jóvenes amos latinos se dirigió al lugar de donde
provenía el delicioso olor y sacó del basurero varios manjares que
realmente olían muy sabroso, pero para su mala suerte en esos momentos
volteó un amo latino y lo vio, y el chico despavorido salió corriendo
llevándose con él la comida ya que realmente estaba desesperado por
comer, mientras que el joven amo latino lo empezó a perseguir, y ahora
todo dependerá de la habilidad del encuerado animal blanco para correr
rápido y poderse esconder en el bosque para que siga siendo libre un
día m� s o de la habilidad del joven amo latino para perseguirlo y
cazarlo y añadirlo a su colección de esclavos blanquillos salvajes
domesticados.